jueves, 17 de enero de 2013

Vivir con Los Miserables


Corrían los noventa, años de bonanza olímpica y de exposiciones universales, entonces nadie sabía lo que era la prima de riesgo y casi mejor no haberlo sabido nunca. Todo se pagaba en pesetas y vivíamos en una especie de burbuja que con los años explotó, llamese inmobiliaria, financiera o simplemente de estupidez supina que nos hizo creer durante muchos años  que eramos una potencia mundial cuando realmente... pero bueno, eso es otra historia.

Patrick Bateman andaba matando todo lo que se le ponía por delante en un New York de yupies y lujos superfluos en "American Pycho" novela de Bret Easton Ellis y en Madrid se estrenaba en el remodelado Nuevo Apolo en la plaza de Tirso de Molina "Los Miserables" musical al que el relato de Easton Ellis hace mas de una referencia. Después de años desde Evita o Jesucristo Superstar, el estreno fue todo un acontecimiento y con los años tras de decenas de obras del mismo género , la capital se ha convertido en punto de peregrinación desde todo el país para, lo que como yo, somos amantes de los musicales.
 
Después de leer la novela a la que hago referencia tenía muchas ganas de ver y oír todo aquello de lo que se hablaba en el libro. Era mi primera obra en un gran teatro y reconozco que empecé por todo lo alto. Ver aquel montaje, mítico, marcan para toda una vida, y vaya si lo hicieron en mi caso. Escuchar voces como las de Pedro Ruy Blas en el papel de Jean Valjean, Carlos Marín (Il divo) de Marius, Gemma Castaño de Fantine o Joan Crosas haciendo de Thernadier me llegaron tan hondo que aún hoy, 25 años después se me sigue poniendo los pelos de punta cada vez que escucho el Cd en casa. Por aquel entonces descubrí un programa en Radio Nacional "La calle 42" presentado por José María Pou dedicado por entero a este género que seguí durante meses. Gracias a él acabé enganchado a este mundo por el que tengo una afición que, reconozco, raya lo friki.

Hace 2 años se repuso la obra, esta vez en la Gran Vía, en el mejor teatro para los musicales de Madrid, el Lope de Vega y aunque el nivel en cuanto a voces no superaba a aquel primero, el montaje final era mucho mas espectacular, construido para ser utilizado en Broadway, Madrid fue el primer sitio donde se utilizaba antes de llevarlo a una de las capitales del género junto a Londres.


El director, Tom Hooper durante el rodaje

Y bien, llegamos a enero de 2013, domingo 13 de enero, y entre tanto trece, por fin la tercera ocasión de ver de nuevo el musical, adaptación del clásico de Victor Hugo. Esta vez en cine, y después de leer críticas, tanto buenas como malas sobre uno de los estrenos mas esperados de la temporada. Nervioso, espectante, tras de ver los trailer en televisión, oír las voces... no las tengo todas conmigo. El director, Tom Hoooper, después de la maravillosa aunque rara "El discurso del Rey" no me parece a priori, la mejor elección para algo que tiene que ser grande, desmesurado. Todo esto es lo que pienso antes de entrar en la sala.

Decido despejarme y disfrutar, empieza la película... Y todo eso que pensaba se desvanece. La primera escena con todo ese derroche de medios que una surperproducción como esta debe tener hace que se vayan disipando las dudas. Primera gran sorpresa, realmente es el musical, no una adaptación hablada con números intercalados. Las frases no cantadas son tan excasas que queda absolutamente ridículo el doblaje al castellano que han hecho innecesariamente, es mas, chirría cada vez que salen. A la gente que ha pagado por ver esta película no creo que le importe leer 10 frases más.

Algo que a la crítica en general no ha gustado es el uso del primer plano para casi todos los números. Mi opinión es contradictoria, no todo es blanco o negro, en las baladas creo que es acertado su uso, acentúan las actuaciones rayando el dramatismo mas sobrecogedor, What Have I Done? con Jackman, On my Own con Samantha Barks, y sobre todo en I Dreamed A Dream con una Anne Hathaway merecedora de todos los premios que le den porque es de ponerte los pelos de punta. Sin embargo en otros números mas corales creo que hacían falta mas planos generales y olvidarse de cierta estética de videoclip, algo que pasa en Master of de House o Lovely Ladies, donde en teatro son verdaderos números de grupo y aqui parece una reunión de gente que canta sin conexión entre ellas. Maravillosos One Day More, o Do You Hear The People Sing? (La canción del pueblo) todo un himno de lo mas actual, quién haya visto el musical o vea la película sabrá porque lo digo. Y esto solo por poner algunos ejemplos.


I Dreamed A Dream, Anne Hathaway
La Hathaway está inmensa en su corta actuación, reconozco que para mi ha sido toda una sorpresa después de pensar de ella que es una de tantas que se hace famosa por comedietas tontorronas y anunciar perfumes caros. No menos inmenso está el verdadero protagonista, Hugh Jackman, otro ganador seguro de premios con el que es, sin dudarlo, el papel de su vida, al menos hasta ahora. Ya veremos que pasa en los Oscar.

Samantha Barks (Eponine) haciendo el mismo papel que ya hizo en teatro, Eddie Redmayne (Marius) y Aaron Tveit (Enjorlas) son las grandes sorpresas de la película porque a Amanda Seyfried (Cosette) ya la habíamos visto en Mamma Mía y aunque aquí cumple sobradamente, no despunta en parte porque su papel es menos vistoso al lado del resto. De los malvados, Helena Bonham Carter y Sacha Baron Cohen (matrimonio Thenardier), han siso injustamente vapuleados por cierta crítica, para mi gusto les ha jugado peor pasada los dichosos primeros planos, algo mas lejos hubiesen lucido mas. Y para finalizar Gladiator-Russell Crowe que si bien cumple no brilla con un papel que es todo un bombón, aún así tampoco llega a decepcionar, simplemente es de los menos buenos. Un pequeño gran guiño para todos los fans absolutos de Los Miserables es la participación de Colm Wilkinson en el papel del Obispo de Digne, este actor fue Valjean en el primer montaje de la obra en Broadway.

Termina la película, silencio sepulcral después de la versión final de La canción del pueblo, algunos empezamos a aplaudir tímidamente, esto es raro en el cine y menos en una multisala de extrarradio donde la gente es mas de palomitas de kilo y coca colas de litro.

Con todos los contras que pueda tener y que seguro le seguirán sacando los entendidillos, a mi me ha emocionado, me ha gustado, me ha encantado... que mas puedo decir. Volveré a verla en pantalla grande antes de que salga en dvd. ¿Quién se apunta?