lunes, 26 de diciembre de 2011

2012


Según el calendario Maya, este año que entra va a ser el del fin del mundo… O eso era así hasta hace unos meses, ahora parece que la versión ha cambiado algo y resulta que lo que realmente querían decir es que se acababa un periodo de la historias e iba a empezar otro nuevo. La interpretación que cada uno le quiera dar a esto es muy libre. De momento con tanta crisis y tanta historia económica lo que parece que está claro es que el descontento con el sistema actual es generalizado en todo el planeta y a lo mejor, solo a lo mejor, el cambio sea ese, el que forcemos todos, a gobiernos y políticos, instituciones financieras de todo tipo y al sistema en general para que de una vez por todas sea de verdad y de una manera pacífica y no como se hacía antes, poniendo una guerra de por medio, que es lo que parecen que van buscando para quitarnos a unos cuantos de en medio.

No voy a ser catastrofista, aún estamos en periodo navideño y no es cuestión de amargar las fiestas a nadie así que cambiemos de tercio. Es tiempo de balance, estamos a final de año y en todos los medios hacen uno sobre de lo bueno y malo que ha sucedido durante este tiempo. También es época de elaborar listas de todo tipo, desde lo CDs mas vendidos a las de mejor o peor vestidas. Todo es una excusa para hacer listas con algo y rellenar páginas de revistas o de webs así como hacer programas especiales en la tele.

A nivel particular, mi lista es la que que creo de anuncios de colonias y perfumes que en estos días crecen como la espuma de cara a los Reyes Magos, y que por mucho que se empeñe Papa Noel, siguen siendo los favoritos, al menos en nuestro país, para repartir regalos. Por supuesto, no se trata de ningún estudio concienzudo ni nadie se juega prestigio ni un cuantioso premio. Se trata de algo entre la familia o los amigos y mas concretamente del grupito de los desayunos del trabajo, caldo de cultivo de numerosas listas ocasionales. Yo este año me quedo con el de J’Adore de Dior, y que conste que el año pasado me parecía hasta del mal gusto (aquel donde Charlize Theron se desprendía de todas sus joyas y ropa carísima diciendo algo así como que a ella no le hacía falta nada de eso, claro, sin salir de la suntuosa mansión donde se desarrollaba la escena). Este año han cambiado el decorado por un pase de modelos y entre bambalinas se encuentra a “compañeras” de la talla de Grace Kelly o Marilyn Monroe, casi ná.

El peor, para mi gusto, el de Carolina Herrera donde una joven modelo vestida con un traje rojo espectacular pretende hacernos creer que es todo muy juvenil con una música rockera que no le pega nada al conjunto, no se que pretende transmitir, da la impresión que la firma de la venezolana-neoyorkina no tiene ni idea de lo que la juventud vive a nivel de calle transmitiendo una idea de esta que no existe.

Ya ha pasado la Nochebuena y el día de Navidad. Todavía queda la Nochevieja y su resaca posterior y la semana siguiente el fin de fiesta que supone el día de Reyes, siempre mas infantil, supuestamente. Las listas de lo mejor y lo peor darán paso a la de las proposiciones de primeros de año, todo aquello que vamos a hacer en cuanto se acaben las fiestas, o después de las rebajas, bueno, o a primeros de marzo, que mas da, el caso es que lo vamos a hacer, seguro.

Por mi parte solo desearos un próspero 2012, por que con lo que está cayendo esta visto que si no hay algo de prosperidad no vamos a tener felicidad ni salud. Del amor ni hablamos. Lo que si me gustaría es que al menos el año que viene sea un poquito mejor que este. Espero hacer balance el año que viene por estas fechas, si no se acaba el mundo antes, claro.


miércoles, 21 de diciembre de 2011

Ya es Navidad

No hace nada que estábamos terminando el verano y diciendo aquello de que el tiempo pasa volando y las navidades llegarían sin darnos cuenta. Pues bien, ya están aquí, a punto de comenzar de manera oficial, porque para los comercios hace casi dos meses que empezaron, las fiestas que conmemoran el nacimiento de Jesús.

Si, porque a veces parece que se nos olvida lo fundamental, que estas fiestas son de carácter religioso aunque ya casi nadie haga referencia a ello. Gracias a la globalización y al mercantilismo que se ha generado, la Navidad se celebra en todo el mundo aunque de manera muy diferente a como fue concebida. Hemos pasado de un triste nacimiento en un establo en medio de Oriente a los fastos en lo que se ha convertido, no hay rincón del planeta donde no se ponga un adorno o se haga alusión al tema. Quiero creer que también genera un cierto buen rollo y eso se pega, gusta y en un mundo cada vez mas deprimido cualquier atisbo de alegría es bien recibido venga de la religión que venga.

Hace poco discutía con un buen amigo el carácter especial de estos días donde parece que se respira algo diferente, el hecho de juntarse con la familia, aunque como en mi caso, los veas muy a menudo, el celebrar en tan poco tiempo tantos acontecimientos, empezando por las comidas de empresa hasta el reparto de regalos, ya sea en Reyes, Navidad o cualquier día o simplemente el salir a la calle y ver el brillo de las luces, comprobar que este año, a pesar de la crisis, también lucen. El caso es que te guste o no, lo notas a cada paso por lo que yo defendía la postura positiva de que si lo son. Mi amigo, por contra, afirmaba que todo es muy falso, impuesto y forzado.

Es posible que tenga su parte de razón, las Navidades son las fiestas que mas detractores tienen, precisamente por todo eso. La obligación de tener que estar celebrando algo cada semana durante casi un mes puede machacar a cualquiera y mas cuando no te apetece para nada hacerlo. Yo puedo entender esa postura pero hasta cierto punto. Creo que son días para relajarse y disfrutar sin mas, si somos optimistas seguro que siempre hay algo que celebrar. Quizás nos falta esa mirada infantil con la que los niños ven las cosas y por eso ellos lo ven como realmente tiene que ser, con ilusión, alegría y percibiendo la magia que nosotros, los adultos, vamos perdiendo al medida que cumplimos años.

navidad11No solo en estos días, sino el resto del año, ojala todos fuésemos un poco niños la mayoría de las veces y que no perdiésemos esa ilusión y esa manera de ver la vida que es la mas simple que hay, si algo te gusta, lo dices y sino pues también, sin mentiras ni falsedades y sin doble sentido para cada frase que escuchamos. La vida es muy sencilla, nosotros la hacemos complicada.

Se que no voy a ser muy original pero os deseo unas Fiestas especiales, divertidas, con cariño, que recuperéis, si la habéis perdido, la magia, la mirada limpia y la alegría necesaria para seguir adelante. Ojalá pudiésemos despertar cada día como lo hacíamos en aquellos días de Reyes de cuando éramos críos ¿recordáis la ilusión con que lo hacíamos?

Que seáis muy felices

lunes, 12 de diciembre de 2011

Como un musical

Me gustan los musicales, ya se que eso me convierte en una especie de friki, lo asumo y francamente me da igual. Es lo que tiene llegar a determinada edad, que te suda todo lo que puedan pensar de ti. Me apasiona verlos en directo o en películas, he visto mucho de los que se han hecho en Madrid en los últimos tiempos, desde Los Miserables en el Nuevo Apolo hasta el último montaje sobre la misma obra en el Lope de Vega. El hombre de la Mancha, Cats, Rent, Cabaret, Grease, Mamma Mía y un largo etcétera que hacen que casi pierda la cuenta. Películas he visto muchas mas, desde clásicos como Sonrisas y Lágrimas, West Side Story, Hello Dolly hasta las mas modernas, Chicago, Nine o la última que acabo de ver, Burlesque.

Un día me gustaría hablar mas despacio sobre muchos de ellos por que si hay algo por la que tengo pasión es por esto. Que le voy a hacer, a otros les da por el fútbol y darían media vida por haber entrado el otro día en el Bernabéu a ver perder al Real Madrid. Yo mataría por ver todas las obras en Broadway o Londres aunque de momento me conformo con no perderme ninguno de los estrenos que se producen aquí en Madrid y que de momento no desmerecen en nada a los originales en las anteriores capitales.


La magia de la que tanto hablo en entradas anteriores se muestra aquí en todo su esplendor, por que decidme ¿Que hay mas mágico que ponerse a cantar en medio de cualquier situación? y además, es algo que sería posible, me explico, si ves una película de época, de ciencia ficción o de aventuras entiendes que es algo improbable que pase por motivos obvios pero cantar o bailar lo podrías hacer en cualquier momento, es factible. Ya se que es algo que nadie en su sano juicio haría de buenas a primeras aunque últimamente y gracias a la difusión que supone internet se ha creado una moda, la de los Flash mob, que consiste en preparar un número y representarlo en cualquier lugar sin publicidad previa, este se graba por una o varias personas, se edita de manera casera y se cuelga en la red. La idea ha recorrido el mundo. Los hay mas o menos elaborados pero el resultado cuanto menos es divertido y sorprendente.

Os pongo varios ejemplos, el primero curiosamente es aquí en Madrid y fue organizado como reclamo y publicidad para el estreno de la serie Glee en Neox, cadena de Antena 3. Serie que por cierto, es musical y con algunos números bastante buenos.







Este fue organizado por una empresa de telefonía en la estación de Liverpool, es de los mejores aunque claro, el patrocinio siempre hace. Se desarrolló para un anuncio aunque la gente que estaba en el inmenso hall no sabía nada con lo que la sorpresa que te puedes llevar a esas horas de la mañana y con la pestaña pegada debe ser mayúscula.





Por último os pongo este en Picadilly Circus en Londres, con el Singles Ladies de Beyoncé. Si buscáis encontraréis decenas de videos similares. De momento es lo mas parecido que vamos a tener a nivel de calle de algo así.



A pocos días de Navidad estamos en la mejor época para disfrutar de un buen musical, de esos que te hacen soñar y ver la vida de otra manera. No se me ocurre mejor manera de celebrarlo que en casa con una buena peli cargada de buenos números y acompañado de un café con pastas o un chocolate con churros, lo que mas apetezca.

martes, 6 de diciembre de 2011

Historias de la Gran Vía IV: Carta desde el tejado

Ya hace seis meses que me fui. Escribo esto sabiendo que nunca lo vas a leer, quizás por eso sea más valiente y me atreva a expresar todo aquello que nunca supe decirte. Aún es pronto para que perdones todo el daño que te hice, ojalá me hubiese dado cuenta antes. Desde aquí solo veo que estas triste, demacrado, con pocas ganas de vivir. Cuanto me gustaría animarte para que salieses adelante, aún no te quiero cerca de mí. Todavía no.

metropolis Esta mañana he visto amanecer sentado junto a la estatua del edificio Metrópolis de la Gran Vía, no es la primera vez que lo veo desde ahí. Recuerdo que siempre me decías que te gustaría vivir en la cúpula, ver salir el sol desde su tejado me hace sentir que estas cerca y sin embargo estas tan lejos, puedo verte pero no tocarte ni sentir tu respiración o tu olor es el peor infierno al que me podrían someter.

No te imaginas lo pequeño y poco importante que se ve todo desde este lado. Es una sensación muy rara, al principio te sientes libre, puedes ir de un lado a otro con solo pensarlo, todo pasa sin tiempo definido, no comes, no te cansas, pero cada día que pasa ves mas claro que el resto la eternidad va a ser esto y te planteas si merece la pena, no se si estoy preparado para ver envejecer a la gente que quiero, verlos sufrir e incluso morir. No tengo opción.

Hoy por hoy lo único que me anima es encontrarte, verte todos los días, saber que saldrás adelante, que encontraras a alguien que te haga feliz. Ahora me doy cuenta que antes no te cuidé como te mereces, daba por hecho que nunca me fallarías y así fue pero a que precio, no vi que necesitabas paz, estabilidad y conmigo no la tenías. Puto egoísmo, no te hace ver más allá de la punta de la nariz, quieres abarcar tanto, saber lo que hay mas allá, que no eres capaz de apreciar lo que tienes a tu lado.

Sabes que te quise más que a mí mismo pero ahora soy consciente que no lo hice bien y ver que sufres me duele. Mi partida te ha liberado, fue muy duro hacerlo así a pesar de que aquella tarde pensaras cortar conmigo. ¿Qué lo habría soportado? Quizás, no lo se. Imagino que no me hubiese quedado mas remedio pero lo que es el destino, al final fui yo quien puso fin a todo de repente, sin preverlo, a lo nuestro, a mis problemas, a mi mismo.

Desde la marquesina del Rialto a diario veo como pasas camino del trabajo, cabizbajo, el frío que ya tercia en Madrid en otoño, a un paso de las Navidades, hace que vayas encogido, abrigado hasta las orejas, estas tan guapo. Con el tiempo me iras olvidando pero espero, deseo, que siempre me guardes en un rinconcito de tu corazón por que mientras sea así yo estaré cerca, cuidándote y vigilando como no lo hice en vida.

Ojalá pudieses leer esta carta aunque creo que en el fondo ya sabes todo lo que dice. Solo te deseo lo mejor y lo vas a tener, las buenas personas se lo merecen y tu lo eres. La tristeza que ahora tienes se irá, pasarás página, volverás a sonreír y yo lo veré desde aquí arriba, solo entonces descansaré en paz.

Te amaré siempre

Oscar

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